miércoles, 7 de julio de 2010

El Pensador

Se fue de su primera copa del mundo despojado, en la lejanía de Corea su España había sido derrotada en la lotería de los penales ante los locales quienes favorecidos por el referato habían llegado a esta instancia. Hace cuatro años una simulación dramática de su ahora compañero Thierry Henry le dio la posibilidad a Francia de contar con un tiro libre inmejorable, Zidane le dio magia a la pelota y por atrás de todos apareció Patrick Viera para destrozar a una selección española que estaba en el ojo de la tormenta porque su entrenador Luis Aragonés había llamado a Henry negro apestoso. Ocho años tuvo que esperar Xavi Hernández para poder estar en una final del mundo, acostumbrado a la gloria en las menores(campeón juvenil 1999, subcampeón olímpico 2000) y en el Barcelona, con España todo parecía esquivo. Hoy debe de estar disfrutando y mentalizándose en cómo superar a la naranja pragmática Holandesa, nosotros venimos disfrutando de él desde hace once años. Figura de la selección sub-20 campeona en Nigeria en 1999, vimos la gestación de un fenómeno que lleva las ideas de La Masía como su mas pregnante pasaporte futbolero.
Cuando en diciembre previo a un amistoso entre la Argentina y España Diego Maradona fue cuestionado sobre qué jugador de España le gustaría que fuese Argentino, la respuesta fue simple, luego de un poco de duda dijo que le gustaría contar con Xavi Hernández. Villa pidió que si ellos entregaban a Xavi necesitarían recibir a Messi. La flamante incorporación del Barcelona no hizo un elogio, simplemente expreso su pensamiento. Así como Messi es la más importante pieza del rompecabezas Argentino, Xavi es la más importante pieza del esquema español, la más importante pieza de la constelación de estrellas del Barcelona y será el hombre más influyente de cualquier plantel que integre de aquí hasta que se retire. Esto se debe a que Xavi es una cabeza pródiga en el futbol, dotado de todas las herramientas técnicas posibles, la mayor virtud de Xavi se centra en su cerebro. Sabe leer e interpretar el partido, hace mejores a todos sus compañeros y al mismo tiempo empeora al rival. Xavi no solo protege la pelota con su precisión sino que sabe como recuperarla si la pierde. Al margen de elaborar todo su juego a través de pases, su capacidad para pisar la pelota es de un deleite autentico y tiene una pegada de los dioses. Fue el mejor de la Eurocopa 2008 y probablemente sea el mejor del actual mundial. Hoy fue el mejor jugador de la semifinal contra la potente y veloz Alemania. Los alemanes son gente que corre con la pelota, Xavi Hernández hace correr la pelota y que se cansen los rivales, es el emblema y el identikit del futbol español, ese futbol que toca la pelota para herir cuando parece que la posesión es solo un capricho, ese futbol que todos intuían que en este mundial no se iba a poder practicar. Pero ese es el problema de las intuiciones, son menores que los pensamientos y España juega bien al futbol porque tiene a Xavi o como yo prefiero llamarlo El pensador.

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