El sueño Indoor

La selección argentina de Vóley gano ayer su cuarto partido en el mundial de Italia, paso a la tercera rueda y ahora tendrá que ver en qué puesto queda entre los mejores doce. Su nueva rueda incluye a dos tremendas potencias como Rusia y Serbia quienes se atoboicotearon y por eso están en esta situación difícil. Lo único bueno de la situación es que le da a un plantel excelente la chance de hacer historia. El equipo comandado por Javier Weber es joven y poco experimentado, sin embargo la juventud también tiene su lado positivo. Esto gurrumines del vóley golpean la pelota con una fuerza que hasta sansón envidiaría y en los bloqueos saltan de una forma que pondría celoso al mismísimo Michael Jordan. Es por esto que Facundo Conte está entre los mejores anotadores del torneo y Sore le puso su firma al ranking de bloqueadores. Otra razón por la cual la edad no es tan importante se ve en el linaje de los jugadores, Facundo Conte tiene apenas 21 años, sin embargo su padre Hugo lo hizo mamar vóley desde el vientre. Rodrigo Quiroga no pasa los veintitrés, su tío Raúl es el mejor jugador de Vóley que yo vi y una de las guías primordiales del capitán de la selección, quien usa el mismo número nueve que uso su tío. Así podemos ver que dos de las grandes figuras del equipo nacional tienen pocos años pero mucha historia con el vóley. Por su parte, el mejor jugador del equipo no tiene ningún linaje en el vóley, simplemente práctica mucho el deporte y desde muy chico. Su nombre es Luciano de Cecco y es uno de los mejores armadores del mundial, sin importar los grandes nombres, el numero quince de la selección Argentina se destaca por sus engaños y la potencia de su saque. Con estas armas, Argentina está peleando en la versión italiana del mundial de uno de los deportes más paradójicos que existen.
La paradoja del Vóley nace en su venta y posterior hermetismo. El deporte lo practica mucha gente, la mayoría de nosotros a pasado papelones en vóley playero e inventado reglas para poder comentar grandezas frente a la red. Sin embargo, el deporte profesional es mucho más difícil y muy distinto a los que nuestros ojos plagados de sal marina ven en los parajes veraniegos. Para empezar, el reglamento está en constante evolución, esto hace imposible que uno se desoriente más de un mes en el seguimiento del deporte. Luego su cobertura mediática es ínfima, lo que confina al seguidor a tener que comprar publicaciones especializadas. Además, cada mundial tiene un formato de eliminación diferente, generando más de un dolor de cabeza. Al margen de todo esto, lo más paradójico sigue siendo el hecho de que un deporte que se aprende a amar jugando al aire libre, se practica en estadios techados en su formato profesional. El indoor tiene grandes ventajas, uno no sufre las inclemencias del viento, ni del frio y el calor, el aliento de los hinchas es más claro y la pelota no se puede ir afuera. Una persona que realmente sabe apreciar las ventajas del indoor es el tenista David Nalbandian.
Mientras se disputa el mundial de Vóley, la temporada Indoor del ATP tour ha comenzado. Esta temporada es la que más le gusta al tenista oriundo de Unquillo, sin sufrir del calor se puede desplazar mejor, al no sufrir por los embates del viento puede colocar la pelota donde él desea a partir de ese genial revés a dos manos. Todavía recuperándose desde lo físico, David opto por obviar la gira asiática y volver al circuito el 18 de este mes para intentar repetir el titulo que logro en Estocolmo en 2008. Ningún año fue más beneficioso para el Rey en canchas indoor que el 2007, cuando en 2 semanas les gano a Nadal y a Federer y se quedo con el actulamente remodelado Master de Madrid(ahora se juega en tierra batida) y Paris. Ese hombre que cuando está bien le puede ganar a cualquiera es mucho más peligroso con un techo sobre su cabeza, la cancha rápida le permite tirar winners envenenados hacia los ángulos contando con la certeza de que la pelota no será desviada por el viento y el aire acondicionado le permite sudar menos y estar fresco para afrontar un partido largo. Con esto en mente, uno se puede ilusionar con lo que será la temporada indoor de David. Todavía en la Argentina, entrenando por lograr buenos puntos en su periplo por los estadios techados europeos. David podrá disfrutar del mundial de Vóley que termina el diez del corriente, todos queremos que pueda festejar una victoria de sus compatriotas del vóley. Al fin y al cabo ambos tienen algo en común, siempre se destacan cuando un techo cubre sus aventuras deportivas.